Luna LLena & Misión Espiritual de los Gatos
Buenos días, buenas tardes o buenas noches, almas del universo.
Nos pasamos por aquí aunque sea domingo, y normalmente no publiquemos en el blog, pero hoy es luna llena, y la energía lunar y la conexión con ella es tan mágica, que queremos compartirlo con vosotr@s.
Os traemos estas imágenes de una bella alma, Perlita, en las que sale una de sus compañeras felinas, Lola, con la luna llena detrás.
Esos seres felinos tan misteriosos que nos encandilan el alma.
Os vamos hablar un poquito de la misión de los gatos en nuestros hogares y sobre todo en nuestras vidas.
Tener a un gato en casa puede ser una de las mejores decisiones que puedas tomar, ya que hay estudios que demuestran que las personas con animales de compañía suelen estar más sanas y felices.
Desde la antigüedad, el gato ha sido considerado un animal sagrado, se dice que podría llegar a ser un excelente defensor de la negatividad, atrayendo así las buenas energías. El significado espiritual del gato recae en la protección. De esta manera en la cultura egipcia, se asociaba al gato a la protección. También era un animal de poder, vinculado a cualidades como la maternidad o la sensualidad.
Otro de los significados del gato es la fortuna, de acuerdo con la cultura japonesa, son el amor, el dinero y la fortuna. Se estima que sirve para traer la buena suerte en la persona que lo poseen, ya sea como mascota o como algunos amuletos.
En un sentido más psicológico el gato está muy relacionado con la intuición, la positividad y la fertilidad, son puntos que representan el simbolismo de este animal.
Los gatos poseen una conexión con el mundo mágico, por lo que se dice que tienen una misión muy importante y es que son nuestros guardianes espirituales en el mundo físico, va “limpiando” tu casa de las energías negativas.
Las personas que tienen gatos en sus casas pueden sentirse afortunados de eso, pues ellos se encargan de protegernos.
Misión Espiritual de los Gatos:
1. Detectan la mala energía y la transmuta
Los gatos tienen la misión de limpiar energéticamente nuestro hogar de malas energías. El odio, la envidia, el estrés, el rencor, las críticas, etc., con las que lidiamos a diario en la calle y nuestros empleos, las traemos con nosotros a nuestras casas y son nuestros felinos los encargados de que estas energías no se queden en nuestro hogar. Abren portales energéticos para desechar la energía baja.
2. Cuida de tu sueño
Mientras nosotros dormimos, ellos absorben esta energía. Adoran dormir con nosotros pues nos protegen de cualquier amenaza espiritual que podamos sufrir mientras dormimos. Se pone a los pies de tu cama para que no tengas sueños malos que pueden atacarte mientras duermes. Nos acompañan y protegen en viajes astrales al dormir.
3. Tienen el poder de sanar
Los gatos se acercan a personas enfermas y tristes. No hacen milagros, pero se acurrucan en aquellos lugares donde están las dolencias y a través de su energía buscan sanarte.
4. Si hay mucha mala energía, la purifican
El estrés, la tensión y las miles de preocupaciones que tenemos a diario se irán de tu casa al pasar un rato con tu gato. Ellos las absorben y las regulan de manera positiva. Cuando el gato duerme libera la energía negativa que sacó de nosotros. Si la energía es excesiva la acumulan como grasa, y suelen engordar.
5. Te brindan sabiduría
Los esotéricos aseguran que los gatos nos brindan el conocimiento que nos falta para avanzar y madurar a nivel espiritual.
6. Maúlla para aliviar las tensiones
Si no le agrada alguien, camina alrededor del dueño para protegerlo. Te avisan si algo va mal a través de sus maullidos, pero luego con el ronroneo vuelven a equilibrar las malas energías.
7. Sirven de barrera para que malas energías lleguen a ti y a tu casa.
No permiten que nada malo llegue a tu vida. Energéticamente hablando, son sabios. Tienen la capacidad de ver las cosas que nosotros no podemos y más aún, de alejarlas
Recordar que un animal no es un juguete, es un compañero de vida, un alma noble, una responsabilidad y puro amor.
Una gata rondaba por el tejado de una casa.
Un aullido comenzó a oirse, quizás el más puro jamás escuchado. Ella maulló ronroneante en respuesta...
Pero la luna empezó a decrecer, y el lobo desapareció.
La gata maulló y maulló, pero no obtuvo, ni un solo aullido lejano. Desde entonces, la gata callejera, deambula por los tejados,
mirando la luna, esperando que vuelva estar llena.
- Autor desconocido- Web.
Fuente: Web.
Imágenes: Perlita
Post: Loren
By: Rincón Mágico De Épona.
@rinconmagicodeepona
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